Las vacas alimentadas con leguminosas producen un 8% más de leche y con mayor calidad

El Centro de Investigaciones Agrarias de Mabegondo (CIAM), dependiente de la Consellería de Medio Rural a través de la Agencia Gallega de la Calidad Alimentaria (Agacal), constató que las vacas alimentadas con leguminosas producen hasta un 8% más de leche y con un perfil graso de mayor calidad nutricional. Son las conclusiones de una investigación llevada a cabo durante tres años con financiación del Instituto Nacional de Investigaciones Agrarias (Inia) y el Fondo Europeo Agrario de Desarrollo Rural (Feader) y cuyo contenido se recoge en una tesis de doctorado presentada recientemente en la Escuela Politécnica de la Universidad de Santiago de Compostela (USC).

El objetivo era analizar cómo la introducción de las leguminosas en el pastoreo o ensilado influye en la productividad animal y en el perfil graso de la leche. Así, se realizaron cinco experimentos donde se compararon las tres especies de leguminosas pratenses más usadas en las granjas lecheras gallegas -los tréboles violeta y blanco y la alfalfa- con el raigrás inglés, en dos casos de ensilado con vacas estabuladas y en tres de pastoreo, todos ellos con niveles medios y bajos de piensos, respectivamente.

Como conclusiones, la investigación arrojó que aumenta la producción y la calidad de la leche cuando en la alimentación de las vacas abundan las especies leguminosas. Así, la producción se incrementó entre un 6% y un 8% de media, tanto en pastoreo como con ensilados, en comparación con pastos de gramíneas puras. Asimismo, se constató una mejora de la calidad del perfil graso de la leche producida con raciones que integran leguminosas, así como un incremento en la concentración de ácidos grasos poliinsaturados totales y de Omega-3 total, particularmente cuando se apuesta por el trébol violeta.

En esa línea, el estudio también revela que procede refinar la tecnología de ensilado de las leguminosas pratenses, en concreto evitando presecados excesivamente largos que reducen el contenido en ácidos grasos poliinsaturados.

A mayores, la investigación destaca el ahorro en fertilizante nitrogenado de síntesis que supone la introducción de las leguminosas en los pastos. Además, concluye que utilizando forrajes frescos y ensilados de buena calidad es posible reducir considerablemente el consumo de piensos en las explotaciones lecheras y mejorar su sostenibilidad económica y ambiental.

Así, los resultados obtenidos muestran que las granjas lecheras gallegas podrían reducir significativamente el consumo de piensos usando forrajes frescos y conservados de alto valor nutricional. De este modo, la inclusión de especies leguminosas en los pastos no solo incidiría en el incremento de la productividad animal y en un mejor perfil graso de la leche sino que encajaría con los requerimientos actuales de los consumidores en cuanto a la calidad de la leche producida con un reducido impacto ambiental.

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