El consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria, Guillermo Blanco, se ha mostrado partidario de reestablecer el equilibrio en la cadena de valor con un modelo en el que el coste real de la producción marque el punto de partida del precio final. “No es posible continuar con un modelo en el que el punto final de la cadena marque los precios de origen”, dijo.

Esta será una de las principales reivindicaciones de los ganaderos y agricultores cántabros que Blanco defenderá mañana en la reunión extraordinaria que el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación del Gobierno de España, Luis Planas, ha convocado para analizar con los representantes de las distintas comunidades autónomas la complicada situación económica por la que atraviesa el sector en el conjunto del país.

En una comparecencia ante los medios de comunicación en la que ha estado acompañado por los representantes de todas las cooperativas y las organizaciones profesionales agrarias de Cantabria, el consejero ha expuesto las reivindicaciones que su departamento ha consensuado con los representantes del sector agrícola y ganadero de la región y se ha mostrado partidario de poner en valor el mundo rural, “dignificando a los productores y a sus productos”.

Asimismo, reclamará medidas que favorezcan la capacidad real de negociación de los productores en unas negociaciones que, en su opinión, “deben ser justas y transparentes”, y para ello, ha dicho, “es fundamental tener en cuenta los costes de producción”. “Se debe partir del precio medio existente en Europa en el momento de la negociación y esa negociación debe realizarse por año natural y no por campaña, tal y como se hace ahora, coincidiendo con el momento en el que el precio es más bajo”, ha opinado Blanco.