#sábadocanalla: Una vieja polémica

En los medios de comunicación se ha vuelto a hablar en los últimos tiempos de una vieja polémica en la que estuvo involucrada hace algunos años la carne de vacuno… y del que ya hablamos en este rincón del sábado. Se trata de la carne de caballo que se vendió en algunos establecimientos de la Unión Europea, además de formar parte de platos preparados.

La detención de Jan Fasen en Calpe (Alicante), conocido como el ‘emperador de la carne de caballo’. Fasen y sus compinches fueron juzgados en París en febrero por el fraude en la venta de carne de caballo que hacían pasar por ternera. Según el tribunal francés, entre enero de 2012 y febrero de 2013, este entramado vendió 538.278 kilogramos de carne de ternera que contenía caballo sin avisar a los compradores de esa mezcla, según recuerda El País. Los análisis de ADN llevados a cabo confirman que la carne vendida era de caballo en diferentes proporciones según el lote. De hecho, había casos en los que solo había trazas y otros en los que casi todo era equino. Esta carne acabó empleándose para la elaboración de platos precocinados, como lasañas, y sacudió en 2013 a media Europa, cuando se detectaron los primeros casos.

Por nuestra parte, nosotros repetimos la idea que ya dejamos hace varios años en este mismo rincón. La carne de equino es un producto legítimo que los consumidores pueden encontrar en el mercado, y que de hecho goza de cierta popularidad en algunas zonas. El problema es el engaño al consumidor, que si quiere comer ternera, tiene derecho a comer únicamente ternera. La confianza del consumidor es clave para mantener cualquier sector agroalimentario.

Comparte este post