COAG-Asturias califica como “insostenible” la situación que genera, a juicio de esta organización agraria, la inadecuada normativa que regula el saneamiento ganadero y que está provocando la ruina de los ganaderos asturianos, al tener que sacrificar animales supuestamente infectados de Tuberculosis y que posteriormente se comprueba que se trata de animales sanos.

Para COAG-Asturias esta situación ha generado una grave desconfianza entre los ganaderos debido a la proliferación de lo que ha dado en llamar ‘falsos diagnósticos’.

La secretaria general de COAG-Asturias, Mercedes Cruzado, declara que “los ganaderos asturianos estamos alarmados por la proliferación de supuestos falsos diagnósticos positivos de casos de tuberculosis bovina en la cabaña asturiana”.

Los afectados que se enfrentan al sacrificio de reses que posteriormente se revelan sanas en las pruebas post-mortem del matadero, sufren una gran impotencia, primero por la pérdida del animal y su costosa genética y después porque se ven obligados a reponer el ganado contando únicamente con las ayudas que dispone la actual normativa.

Esta indemnización no cubre ni el valor de los animales ni “el lucro cesante”, es decir lo que el ganadero deja de percibir mientras sus nuevos animales empiezan a producir. Por ello, vamos a reclamar a la consejería de Agroganadería medidas para que los diagnósticos sean más rigurosos, a fin de evitar los considerables perjuicios que padecen.

Independientemente de estas reclamaciones, desde COAG-Asturias se está estudiando la posibilidad de impugnar una normativa que entendemos anti-constitucional y que provoca una grave indefensión, al negar a los afectados el derecho a realizar una prueba de contraanálisis que verifique o no la presencia de la enfermedad.