La consejera de Desarrollo Rural del Principado de Asturias, María Jesús Álvarez, ha enviado una carta al presidente de Tragsa, Francisco Baratech, en la que le emplaza a cumplir con los compromisos adquiridos por la empresa para llevar a cabo la campaña de saneamiento ganadero en Asturias, según publica Agroinformación.

Dicha campaña debía haber comenzado a principios de año y se ha visto afectada por la suspensión de determinadas rutas de saneamiento después de que el ERE (Expediente de Regulación de Empleo) aplicado en Tragsa provocase el despido de dieciocho veterinarios que venían realizando esta función en Asturias. En su misiva, Álvarez recuerda que la encomienda de gestión realizada a Tragsa exige el cumplimiento del calendario de ejecución de la campaña y la obligatoriedad de contar con el personal veterinario de las anteriores para realizar estos trabajos.

Dicho colectivo formó parte del acuerdo alcanzado en junio de 2005 para dar solución al conflicto laboral que protagonizaron y que culminó en una decisión unánime del Parlamento asturiano que venía siendo cumplido desde entonces por el Gobierno regional y por Tragsa.

Dada la relevancia de la campaña de saneamiento, advierte la consejera, el Gobierno, que no ha variado su criterio desde 2005, no puede “transigir en modo alguno con su quebrantamiento” y, si Tragsa vulnera “unilateralmente” esos acuerdos, deberá dar explicaciones públicas y asumir la responsabilidad de sus decisiones “sin descargarlas sobre los trabajadores ni sobre el Principado”.